Veronica Morera
Bucles mentales y ansiedad
Actualizado: 27 oct 2021
Somos humanos con una mente... y muchos tenemos puta idea de cómo convivir con una.
Se normaliza abusar de una mente, entrenarla en bucles exhaustivos por nuestros miedos no resueltos y.
Para algunos no habrá ninguna consecuencia grave de la inhabilidad de armoniosamente convivir con una mente, mientras que otros manifestaremos síntomas muy dolorosos y hasta peligrosos.

El bucle mental es una causa y consecuencia de un apego mental excesivo.
Todos nos apegamos a nuestra cabecita de vez en cuando... a sus peliculas e ilusiones... al ego que se encuentra ahi... despues de todo la mente es como una pantalla de televisión frente a nuestros ojos, y a quien no le gusta una buena pelicula.
Pero en algunos casos los bucles son muy intensos y frecuentes (cada quien escogerá cuando considera que ese es su caso) y se acompañan de ataques de pánico, tensión corporal, insomnio, respiración corta y superficial, abandono del mundo real compartido, vivir en la mente, inconsciencia, desnutrición espiritual y ansiedad sostenida. Puede haber una tendencia a irnos hacia el control o catastrofismo, muy comúnmente con desconfianza y egocentrismo (todo es acerca de "mi").
Un bucle mental se suele caracterizar por ser:
inútil: lleva a poca o ninguna acción en el presente.
repetitivo: monotemático.
poco eficiente: el balance energia gastada - beneficio obtenido es incoherente y nos deja "debiendo energia".
llevar a abandonar la realidad: desconexión corporal y espiritual con inconsciencia del presente.
Debido a que los bucles mentales suelen tener como motor de fondo ego, es bastante común reconocer señales de emergencia y miedo (ansiedad) antes que reconocer que estamos viviendo en la cabeza (un pensar compulsivo y abandono de la realidad).
Nos fusionamos con la mente, de manera que creemos que somos una mente con patas.
Un bucle mental que permanece sin ser trabajado se abandona por cansancio extremo (burn-out o colapso) pero sigue el "problema" sin realmente resolverse o se resuelve el "problema" a punta de control rigido (ahora necesitas estar hipervigilante ante incertidumbre) o ilusiones de todo siempre será como uno quiere (solo traerá más pataletas).

¿Pero qué hacer con la mente entonces?
Todos necesitamos planear, organizar y proyectar sino morimos.
La cuestión aquí es:
establecer limites.
tomar responsabilidad no culpabilidad.
trabajar consciencia (atención plena) diariamente .
aceptar incertidumbre.
Mientras que pensar nos brinda una ilusión de predictibilidad y esto nos da comfort y seguridad, es importante que no sea la única fuente de paz en presencia de incertidumbre o miedo. Que tu mente no se convierte en la responsable de que sientas siempre confianza.
Necesitamos consultar a la mente de manera respetuosa y respetar su habilidad y no exigirle que sea la madre/padre que no somos hacia nosotros mismos.
Para trabajar nuestros bucles mentales necesitamos:
Tomar consciencia del momento en que ocurren.
Escoger cuando representan un problema.
Trabajar la causa subyacente (cansancio, hormonal, desnutrición espiritual con ego inflado).
Cubrir necesidades básicas que nos llevaron a exceso de bucles mentales.
Re-entrenar a la mente para que respete incertidumbre y suelte patrones de control rigido.
Te invito a entrar a mi Escuela online El Camino, donde descubrimos más acerca de cómo reconocerlos, cómo salirnos de bucles mentales y su relación con salud mental.
También puedes apoyarme en Patreon si deseas y escuchar mi podcast exclusivo en minimalismo, espiritualidad y trabajo de ego donde también tengo un episodio y una meditación específica para bucles mentales.